Actualmente la biomecánica se ha integrado profundamente, no solo en el mundo del deporte profesional, sino también en el deporte amateur, en la readaptación de lesiones, en la ergonomía, en la prevención de riesgos laborales, etc. Gracias a los avances tecnológicos hemos conseguido analizar y estudiar con rigor científico muchos de los aspectos biomecánicos que afectan no solo al rendimiento deportivo, sino también la calidad de vida de las personas independientemente de su edad, sexo o discapacidad. Dado que el análisis del movimiento humano es un área de conocimiento multidisciplinar que puede estudiarse de desde diferentes entornos y perspectivas (clínicos, laboratorios de rendimiento deportivo o centros de fisioterapia) tiene sentido proporcionar a cada usuario un conjunto específico y práctico de herramientas y protocolos de acuerdo a sus necesidades.